Las metas profesionales y financieras podrían parecer completamente estancadas y esto podría hacer que te deprimas, frustres y entres en pánico. No caigas en esta trampa. Esto no es una condición permanente. Estarás de nuevo en marcha en pocos días. Entre tanto, trata bien a tu cuerpo. Vete a tu restaurante favorito, cómprate un regalo o pasa la tarde en una librería. Al menos te sentirás mejor.
¿Todavía protagonizas el espectáculo, sin importar dónde estés o con quién estás? ¡Por supuesto que sí! Probablemente tienes un verdadero desfile de admiradores a tu alrededor, sonriendo, saludando y haciendo todo lo posible por llamar tu atención. Lo puedas ver o no, te están observando. Vístete de manera apropiada.
Exhibe sin ningún temor esa actitud positiva que estás experimentando. Muéstrale a la gente que te sientes muy seguro/a de tu trabajo y que sabes cómo desempeñar tus tareas. Lograrás sumar muchos puntos con tus empleadores. No hay motivo para que ocultes la fuerza que posees.